Si estás pensando en estudiar la Carrera de Derecho, pero aún no sabes si realmente estás hecho para la abogacía aquí te dejamos cinco habilidades que los estudiantes deben desarrollar a lo largo de la Licenciatura para triunfar en el mundo de las leyes:
Organización y planificación En general, todas las actividades profesionales necesitan planificación, sobre todo porque normalmente tenemos que respetar no solo nuestro tiempo, sino también el de los que trabajan con nosotros e incluso el de nuestros clientes. Desarrollar la disciplina es básico para poder alcanzar nuestras metas y definitivamente también lo será para poder ser más organizados y planear nuestras tareas. Trabajo en equipo Aprender a trabajar en equipo es un requerimiento que no nada más es propio de los abogados, es necesario desarrollar esta capacidad desde que estamos pequeños para sea más fácil adaptarnos a los ambientes en los que nos desarrollamos. Específicamente hablando de los Licenciados en Derecho tienen que estar consientes de los grandes volúmenes de información que a veces suelen manejar, por lo que saber manejar un equipo y ser parte de este es necesario para dirigir correctamente los esfuerzos. Empatía La empatía es básica para poder negociar, conseguir nuevos clientes y cuidar a los que tenemos, esta capacidad se desarrolla todos los días. Hacer el esfuerzo por entender al otro sin dejar de ser objetivo y racional no es una labor fácil, sin embargo, dentro de la abogacía es una habilidad básica para poder ejercer, a través de ella se despierta el deseo de ayudar siguiendo los principios éticos y morales. Capacidad de comunicación La capacidad de comunicarse y aprender a escuchar va de la mano con la empatía. Trabajar en establecer lazos que hagan que nuestros clientes se sientan en confianza nos ayudará a que los casos que llevemos se desarrollen de una mejor manera. Sin duda, esto contribuirá a que les ofrezcamos un servicio de calidad a quienes se acerquen a nosotros. Negociación La habilidad de negociación, al igual que muchas otras, te la da la práctica. Una vez que empiezas a conocer los casos y a los clientes será más fácil plantear situación que beneficien a todos. Siempre es necesario tener en cuenta que un problema tiene más de una solución, no cerrarnos a las posibilidades es básico para poder rescatar términos que les convengan a ambas partes. Ahora que las conoces, ¿cuántas de estas consideras que posees? Al final es importante que recuerdes que todas estas se perfeccionan con la práctica, así que pon manos a la obra y empieza de una vez.
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